En La Rioja representa un transportarse hacia el pasado. Esta maravillosa provincia ofrece visitar reservas arqueológicas y tesoros paleontológicos, pueblos antiguos erigidos en bellos paisajes, y bodegas donde se vivencia la historia de la vitivinicultura.
Combinación de fértiles oasis y áridas sierras, a lo largo de la Ruta de Valles y Montañas se encuentran las bodegas industriales y artesanales, que dan nacimiento a un Torrontés reconocido a nivel mundial. Cercanas a restaurantes, paradores, artesanías, y a bellezas naturales únicas; las rutas del vino se fusionan con las del olivo, las del turismo gastronómico, histórico y cultural, prometiendo una experiencia incomparable.
Villa Unión: Esplendidas bodegas ofrecen no sólo servicios vitivinícolas, sino también gastronómicos, de hospedaje y recreación.
La Costa: A los pies de la Sierra de Velasco se extienden la Rioja Capital y sus alrededores,reciben a sus visitantes en pintorescas bodegas artesanales.
Chilecito: La zona vitivinícola más consolidada de la provincia, Chilecito, posee numerosas bodegas, en su mayoría industriales; pero ubicadas en un paisaje de pequeños poblados vitivinícolas que le otorgan una identidad particular.
Fuente: Caminos del Vino //// Google Imágenes
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